Tiru Rakhi
En un tiempo atrás, cuando la hambruna aclamaba las puertas en mis tierras indias, me quedaba observando la preciosa bola plateada colgada en la noche.
Durante mis primeros años de vida, estuve rodeada de color, dientes rotos y sonrisas sin cansancio, persiguiendo sueños, nuevos y mejores amaneceres.
"India fue, es y será mi eterno horizonte quebrado."
El destino quiso romper los lazos, creando otros; lejos de serpientes encantadas, vacas sagradas. España, adoptó una niña de seis años. Con las cicatrices de vestimenta, mirada de desconcierto, el amor de los padres barceloneses, calmaron la ansiedad. Sin embargo, a pesar de ello, la pequeña no supo sobrellevar las torturas nocturnas, fatales sueños. Pues recordaba una y otra vez, la anterior vida.
Sus progenitores la introdujeron al mundo de la literatura, cada anoche, antes de acostarse, su madre le leía cuentos infantiles hasta que la pequeña dejó de depender ella. Descubrió en las lecturas, el refugio y el consuelo inexplicable por aquello cuánto sentía, vivía. Incomprendida. Ellos, la familia que le tendió la mano a ése merecer, entregaron cuánto poseían, incluida la biblioteca de lecturas tan variopintas como tamaños. Inmensa, inmersa y sumergida, creció rodeada entre fantasía, historia, mitología, ficción.
Cerca de los diez años, Rakhi dijo a los padres:
"Quiero ser escritora".
Descubrió la poesía, participando en un concurso literario de estudios primarios, quedándose en posición cuarta de cincuenta niños del mismo curso.
Tirupathamma Rakhi, escribía en libretas y diarios hasta cerca de los veinte años. A los dicienueve, la joven autora, creó un perfil en blocs donde compartía textos y algún que otro poema.
Mediante redes sociales como Facebook, la editorial Germania (de Valencia) le ofreció publicar su primer obra, Les relíquies daurades en 2014. Con este poemario, Tirupathamma Rakhi, inicio su camino en el universo literario. Con tan solo veinte años logró comenzar a cumplir sus sueños.
En 2017. tres años más tarde, publicó Proezas. Juego del azar; su segundo poemario, en Caligrama editorial. En 2019, dio voz al erotismo con la obra Átame a tu boca, a través de Célebre editorial (Badalona). Tras su gran éxito, en junio del 2020, se hizo una segunda edición más ampliada: Nunca soy yo.
Participó en su primer recital por la organización Ateneu barcelonés al poco tiempo de publicar su primera obra, Les relíquies daurades. Desde entonces, la joven poeta no ha cesado en seguir creciendo, involucrando en todos los eventos literarios en las que era invitada. Por primera y única vez hizo partícipe en un concurso poético de Tarragona, "Escales que pugen al cel" (Escaleras que suben al cielo). Donde quedó ganadora en única posición y modalidad castellana, con el título del poema "Diluvio de la tierra al cielo".
A lo largo de los primeros seis años en el mundo artístico, Tirupathamma Rakhi, ha sido entrevistada en Rac1 (emisora de Barcelona), Radio OnaLatorre (emisora de Tarragona), Radio Cugat (Sant Cugat Barcelona), entrevista y tertulia en Parets del Vallès (Barcleona), entrevista televisiva en "de la mà de cultura" (Barcelona), Mataró radio audiovisual, radio Arenys de mar (Barcelona), radio Sant Vicenç dels Horts (Barcelona), radio Majuelos (Tenerife). Ha participado en un recital internacional de Barcelona, Fedelatina ( comunidad de poetas de latinoamericanos). Además, durante el año 2020, comenzó a crear su propio programa de directos en Facebook e instagram; aunque a finales del mismo optó por un canal de Twitch donde habla de «Desastres de una escritora». Un directo informal, cercano, trata los temas cotidianos que sufre en su rutina con humor y diversión.
Os invito a descubrir sus redes sociales de Instagram, Facebook y Twitter como Tiru Rakhi; para más curiosidades artísticas en su página web.
Mis vídeos
Mis libros
Hay un sendero que empezó con dudas, miedos, terrores y escalofriantes sueños que no dejan dormir en las noches de día. Dónde las historias se quedan entre páginas blancas esperando a que sean escritas, diseñando fábulas en otros parajes, copos de sangre y lluvias de bochornosas miradas. ¿Andarán las palabras en busca de un cuerpo fértil de santos o de un jardín adornado de veneno para ser absorbido por un último aliento, suspiro hechizado? Si así es, ¿Quién es la porcelana descuidada con la gala de ausencias entre perlas de hierro, barro de pétalos? ¿Quién dejará huellas en las cenizas de un fénix en enjambre? Por qué este repentino escalofrío en la tenebrosidad de las danzas sin melodías, sacudida de confusiones, memorias de veintidós años de reflejos. La compilación de cosechas en pensamientos, coraza de nieves por alimentar almas desordenadas y escafandras aún por ser amaestradas, no hay tiempo para el razonamiento.
Es pues Tirupathamma Rakhi en esta obra, y en tantos textos que nos brinda a diario, una clara heredera de las tendencias líricas más significativas surgidas en Estados Unidos a finales de la década de los cincuenta: el confesionalismo (Robert Lowell, Silvia Plath, Anne Sexton, Theodore Roethke…), cuyos autores comenzaron a escribir poemas de intimidad poco usual, que incluía, entre otros tópicos, las relaciones de pareja. También lo es de las conquistas políticas de las mujeres europeas que, a lo largo del siglo, crearon condiciones propicias para la aparición de un tipo de literatura en la que por primera vez las escritoras daban cuenta de su mundo, sin excluir el cuerpo, y explicaban qué significa ser mujer. (Recensión)
Los poemas agrupados en Átame a tu boca se ajustan más al motivo de la búsqueda, la ausencia, el disfrute del placer efímero y la vertiente violenta de la pasión. En cambio, los de la publicación más reciente Nunca soy yo bucean más en los entresijos del amor y se recrean en las situaciones que generan o incrementan el deseo, como los Versos del confinamiento o los Rojizos tejados, fruto de un viaje de la autora a Marrakech.
De todos modos, es evidente un estrecho nexo de unión entre ambos poemarios, caracterizados por una evolución de la poeta hacia una poesía más cercana a la realidad y más profunda en sus sentimientos y emociones. (Reseña)